jueves, 3 de noviembre de 2011

La Vía Láctea sobre el Pico Tobacor

Una más de las fotografías nocturnas hechas desde el refugio de Góriz donde se puede ver la Vía Lactea asomando por detrás del pico Tobacor, que puede verse su perfil recortado en la oscuridad de la noche. A pesar de ser noche cerrada y de estar lejos de la contaminación lumínica, al mirar hacia poniente aún se ve cierta luminosidad del lejano ocaso. O eso, o Sabiñánigo contamina mucho la noche en el Sobrarbe...


martes, 1 de noviembre de 2011

La Cola de Caballo, P.N.Ordesa


La renombrada cascada de la Cola de Caballo, en el circo de Soaso, al final del valle de Ordesa y en esta ocasión casi sin agua debido a la sequía que persistía desde principios de verano, lo que nos permitió acercarnos a su mismísima base, algo impensable hasta ese día ya que a unos 20 metros era imposible fotografiarla sin que se mojara la lente por las salpicaduras y el agua en suspensión.

Aquí podéis ver otra imagen captada en junio de este mismo año en la entrada "Y a pesar de todo no fue un mal día".


Por cierto... en ocasiones veo caras... vosotros también la veis?

lunes, 31 de octubre de 2011

Desde el refugio de Góriz




Originalmente cargada por Neus de Saavedra.
Un deseo hecho realidad, llegar a Góriz sin morir en el intento. Ya sé que a algunos les sonará exagerado, pero para alguien que no está en forma la subida puede llegar a convertirse en misión imposible. Después de algunas semanas de entrenamiento lo conseguimos sin dificultades y al llegar, la vista era la recompensa.
En junio, durante una estancia en el refugio de Pineta, había leído una guía que hablaba de "preguntas que no hay que hacer al guarda de Góriz al llegar al refugio" y recordaba que en algún sitio recomendaba que al llegar, antes de entrar y buscar al guarda para registrarte, lo mejor era quitarte la mochila, soltarla frente al refugio y sentarte un rato en la entrada a descansar un poco de la subida y recobrar el aliento antes de entrar a presentar tus respetos al guarda.
Así lo hicimos, con la agradable compañía de otros montañeros, algunos compañeros que conocimos en ruta y una perrita de uno de los guardas llamada Untxu, que se acercaba buscando algo de comer a todo aquél que llegaba.
Después se trasladó la charla al comedor porque al caer el sol refrescó y con tan agradable charla, casi se me escapa el mejor momento de luz del día! cuando el sol, anaranjado, se abría paso por poniente entre alguna nube e iluminaba, con estos cálidos colores, sierra Custodia mientras Untxu descansaba apaciblemente después de haber recibido algunos "premios" de todos los montañeros que habían merendado cerca de ella.
Una imagen llena de sensaciones para mi memoria.

jueves, 27 de octubre de 2011

El Cielo sobre Góriz


El Cielo sobre Góriz, originalmente cargada por Neus de Saavedra.
Hacía mucho tiempo que iba detrás de subir al refugio de Góriz y pasar una noche allí para poder fotografiar el cielo lejos de la contaminación lumínica de pueblos y ciudades y desde un lugar elevado.

La noche se presentó bastante clara, aunque hicieron aparición algunas nubes que pasaban lentamente de norte a sur.

En cualquier caso no fueron capaces de ensombrecer el espectáculo nocturno y el cielo brilló sobre Góriz para nosotros.

jueves, 13 de octubre de 2011

Bajo mis pies





Originalmente cargada por Neus de Saavedra.
Hace ya un tiempo de esta foto, pero el otro día retomé la carpeta de esa sesión de fotos y me gustó. No hay nada como dejar dormir tus fotos...
Ahora que está todo el mundo mirando al cielo preguntándose, cuándo lloverá? Cuándo dejará de hacer calor? subo esta foto para mirar en dirección contraria, hacia el suelo, que se encontraba a unos cuantos metros bajo mis pies.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Un otoño más en Ordesa



De nuevo es otoño y aunque el tiempo no está demasiado por la labor, estoy impaciente por que llegue el día de volver a Ordesa.

Ordesa es bella, hermosa, imponente... Es el lugar donde mis pilas se recargan al máximo, donde mis recuerdos de la infancia vuelven a revivir con intensidad y donde me siento bien.

Mi cámara y yo en Ordesa... qué más puedo pedir, además de una buena compañía?

Viendo esta imagen me asalta la pregunta que tengo en mi interior desde hace meses:

Qué visiones me regalarán sus caminos este otoño?

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Y a pesar de todo, no fue un mal día


Amanecimos temprano, pero no lo suficiente...
Aquél día teníamos planeado subir hasta el Refugio de Góriz para pasar allí una noche fotografiando el cielo nocturno sin contaminación lumínica o con la mínima posible.
Los planes del día incluían subir por la Senda de los Cazadores por primera vez y pagamos un precio muy caro por no estar lo suficientemente en forma. Nunca pudimos imaginar que sería tan dura para nuestras anquilosadas piernas.
La Senda de los Cazadores es un sendero que parte de la pradera de Ordesa, junto al aparcamiento y que enseguida se empina haciendo un zigzag por una pared casi vertical y  que nos llevó 3 horas terminar hasta el mirador de Carcilaruego, aunque nosotros lo bautizamos con otro nombre más propio.
Una vez allí retomamos la senda que recorre la Faja de Pelay a cierta altura y la luz no acompañó demasiado, a pesar de que nuestros sentidos se llenaron de la enorme belleza del valle de Ordesa y sus montañas desde esa situación privilegiada. No hice demasiadas fotos, la premura por intentar llegar a Goriz a la hora de cenar y la ausencia de una luz interesante para el paisaje me lo impidió. Ni siquiera le dediqué una foto a los edelweiss que nos encontramos recién brotados casi llegando ya al circo de Góriz. Cuando por fín llegamos al fondo del valle ya eran las 17:30. Nos había costado toda nuestra energía y aún quedaba la fuerte subida hasta el refugio. Después de unos minutos de indecisión, de frustración y de rabia tiramos la toalla y dejamos la subida al refugio para otra ocasión.
Antes de retomar el camino de retorno por el fondo del valle dediqué unos minutos a fotografiar la cascada de la Cola de Caballo que caía con un buen caudal de agua.
Durante el regreso nos prometimos volver a cumplir nuestros planes y poder contemplar y fotografiar la noche estrellada desde Góriz en otra ocasión.
Al volver a casa y descargar las fotos no me gustó ninguna en especial. Pesaba mucho la decepción del día en mi estado de ánimo y eso afectaba a las imágenes que capturé. Ordesa me había derrotado.
Pasados unos meses he retomado la carpeta y alguna foto se ha salvado... lo que hace la distancia y el desarmar las imágenes de su carga emocional... a pesar de todo, no fue un mal día...

lunes, 19 de septiembre de 2011

Por tierras de Don Quijote



Hacía tiempo que quería fotografiar molinos de viento. Molinos de los clásicos, de los que evocan capítulos del Quijote por tierras de La Mancha.

Estuvimos en Navidades, las más frías que he vivido, con una ola de frío polar asolando la península, que nos acompañó todo el viaje... qué frío! 

Salimos del hotel sin desayunar, aún no se había despertado nadie y la recompensa fue un colorido amanecer que nos hizo olvidar un poquito el frío que sentíamos, a solas entre los gigantes de Don Quijote y con la breve visita de algún que otro habitante de Campo de Criptana paseando a su perro.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Itzurun

Tenía ganas de poder fotografiar los flysch de la costa del Cantábrico en condiciones, pero planear el viaje tenía su miga, sobre todo para los que nos hemos criado en el Mediterráneo. Hay que tener en cuenta el calendario de mareas y la hora de salida y puesta de sol, así que,  buscando con antelación, encontré la feliz coincidencia que buscaba para desplazarme hasta el País Vasco. Dos días de junio, en los que seguramente habría algas verdes sobre las rocas de la costa y que coincidía la marea baja tanto al amanecer como al atardecer. No es fácil que coincidan, así que esos días estaban grabados a fuego en mi agenda.

María, que vive en Zumaia, nos facilitó una excelente información sobre alojamientos y sobre localizaciones, cosa que aún no le he agradecido lo suficiente.

A ella, por su amabilidad y compañía va esta fotografía que es la primera que revelo de ese viaje.

Un abrazo María, hasta pronto!

miércoles, 31 de agosto de 2011

Llegando a San José

Hacía mucho tiempo que quería visitar el Cabo de Gata para fotografiarlo y por fin en febrero de 2011 se presentó la oportunidad. Llegamos pasadas las 3 de la tarde, después de conducir de tirón los 850 km. que separan San José de casa. Ya por Castellón nos metimos de lleno bajo una grandiosa tormenta que nos acompañó el resto del viaje que hizo que la lluvia se convirtiera en un peligro evidente para la conducción, con alguna pausa escasa. Cortinas de agua, autopista semi-inundada, rayos... en fin, un viaje nada relajado. Llegamos a San José con lluvia y aunque no soy supersticiosa, creo que fue como una premonición de lo que nos íbamos a encontrar aquella semana.



Era lunes, pero el pequeño pueblecito estaba casi desierto en invierno, fuera de la temporada de veraneantes y turistas que lo invaden todo. Fuimos a comer algo y nos costó encontrar un bar abierto donde nos dieran de comer debido a la hora tan tardía, aunque al final lo encontramos en el puerto, un sablazo por una ensalada y unos calamares a la romana que no lo valían ni de broma. Se puso a llover de nuevo pero después de comer preferimos ir a dar un paseo para ver el pueblo. La lluvia hacía la tarde desapacible y después de hacer algo de compra para el apartamento volvimos a refugiarnos en él. Un poco de siesta, con el rumor del televisor de fondo, me ayudó a pasar la tarde. Empezaba a encontrarme mal. 






Al despertarme de la siesta el tiempo había mejorado mucho! pero ya era demasiado tarde como para salir en busca de una localización para fotografiar el atardecer. Salí a la terraza, enrabiada por la pérdida de tiempo y de una buena oportunidad y me resistí a quedarme sin un recuerdo de la luz de ese momento. Desde la terraza del apartamento fotografié la vista que me regalaba de San José.